Estos últimos días han sido algo difíciles, ¿por
qué todo tenía que cambiar? ¿Por qué tenías que tomar una decisión que no va? ¿Acaso
no notas que todo mi mundo se va para abajo? Todos están felices por ustedes; si,
se besan, abrazan, acarician y sonríen, tú y ella se encuentran en una burbuja
de sentimientos la cual parece ser que nada ni nadie podrán reventar. Pero… aquí estoy. Te conozco desde antes, me
ilusionaste tiempo atrás, me hiciste pensar que todo marchaba bien, que nadie
te hacía más feliz que yo, me engañé, me mentí, pensé cosas que no iban en ese
lugar, me lastimé e ilusione y ahora estoy pagando el precio.
Nadie comprende lo que me pasa, todos me miran y
piensan que me he ido. Más tú no lo notas, trato de sonreír, de fingir que todo
está bien. Más no puedo ni convencerme a mí misma. Quisiera decirte qué me
sucede, confesarte lo que siento, lo que me mata por dentro. Desearía contarte
mis temores, la razón por la que lloro desconsoladamente bajo el chorro de agua
mientras me ducho, o por las noches mientras miro las estrellas desde mi
ventana.
Pero ahora solo me quedan mis recuerdos, porque es
como si te hubieras ido. La música es mi respaldo, me embebo en ella y trato de
no pensar en nada más; mirar la obscuridad de mi cuarto resulta un tanto
reconfortante, pensar en cosas sin sentido lo es también. Ya no hablamos mucho,
porque parece ser que careces de tiempo, lo cual no ayuda mucho, por lo que
también tendré que buscar nuevas amistades. ¿Por qué es tan difícil? Todos dicen
que los cambios son buenos, así que supongo que tengo que enfocarme en ello y
buscarle el lado positivo a todo esto, más no lo encuentro.
Supongo que soy afortunada y debería agradecerte,
ya que me enseñaste que merezco a alguien mejor que tú, que hay alguien haya
afuera esperando por mí, para hacerme la persona más feliz del mundo y tratarme
como realmente merezco, así que me limpiaré estas lágrimas que corren por mis
mejillas y veré a las estrellas, diré tu nombre a ellas por última vez y me
enfocaré en mi presente. Pensar en todos esos “imposibles” que podrían
convertirse en mi futuro.
Sé que no es fácil convencerme de esto, pero lo
intentaré. Gracias por los recuerdos y mucha suerte, de nuevo.
Creo que esto lo escribes para el mismo del que te comenté ¿no?
ResponderEliminarSí es así, ¿ves como ha cambiado? El primero explicando simplemente el dolor y preguntándose solo el por qué, el segundo despidiéndote de él quizás para siempre...
Me veo totalmente reflejada en ti, porque es la misma situación con personas diferentes y a la vez muy parecidas: ambos nos hicieron creer cosas que no son...
Y gracias a eso me he dado cuenta de que no siempre hay que guiarse por lo que vemos, por lo que creemos que vemos porque la vista siempre engaña...
Espero que todo esto quede atrás y empieces de nuevo :)
Besoos!!^^
Así es Lidia, estás en lo correcto. Y tienes razón, ha sido una semana en la que me he dado el tiempo para tratar de cambiar las cosas y empezar nuevamente, porque como tu dices, hay ocasiones en las que la vista nos engaña, así que supongo que ahora debo buscar otro camino para poder ser feliz. Me alegra saber que no soy la única que ha pasado por esto y que chicas como tú comprenden totalmente lo que me pasa, y es reconfortante saber que tu has podido salir adelante, por lo que sé que yo también lo haré :) Te aseguro que así será. Igualmente espero lo mismo para tí, que puedas encontrar a un chico que realmente te merezca y aprecie por quién eres. Suerte y saludos!
Eliminar